La Justicia está abocada a la investigación de la muerte de Romina, preceptora de un colegio de la ciudad y de su ex pareja.
Cristian Muñóz se quitó la vida mientras lo buscaban por el asesinato de su expareja y madre de sus tres hijos, Romina Adén, en su casa de barrio Don Bosco de Alta Gracia. La mujer de 40 años fue hallada por su papá y su hija de 22 años en la bañera de la propiedad, ahorcada, con un profundo corte y ensangrentada.
Lo que pasó las horas previas al crimen confirmarían una planificación aberrante. En la noche del jueves, el abuelo materno llevó al adolescente de 14 años y la niña de 3 a la casa de la abuela paterna, a donde también vivía el único sospechoso. La hija mayor de 22 se fue a dormir a lo de su novio.
Romina quedó sola en la propiedad y Muñóz se enteró por mensajes que cruzó con su hija más grande. “Cristian le escribió para decirle que los hermanos ya estaban con él y le consultó qué había hecho ella”, relató una allegada a la víctima.
“Cuando ella le dijo que estaba en lo del novio, él le respondió ‘ah, mamá está sola entonces’ y ella le dijo que sí”, continuó. La joven le escribió a su mamá alrededor de las 23:20 y Adén le comentó que estaba todo bien y que acababa de llegar su papá.
Preocupada y como si hubiera sentido que su madre estaba en riesgo, la chica le volvió a preguntar si estaba bien a las 23:40 pero la víctima no respondió. Muñóz ya la había asesinado y la había dejado en la bañera.
Los vecinos comentaron que durante la noche se escucharon gritos y también cosas que se rompían. Incluso, relataron que lo vieron cerrar con llave e irse de la propiedad en plena oscuridad de la noche.
Hallazgo
Durante la madrugada nadie sospechó nada. La hija mayor se durmió y los dos más chicos estaban con su abuela. Nunca notaron la ausencia de su padre en el domicilio.
El viernes a la mañana el papá de Adén la fue a buscar como cada día para llevarla hasta su trabajo, en el Instituto Manuel de Falla. Al llegar, su hija no le abría ni tampoco respondía los mensajes. Decidió llamarla y escuchó que el celular sonó en el interior de la casa.
“Ahí llamó a la nieta y le pidió que fuera, que Romina no le abría y que escuchaba el teléfono”, relató con dolor la misma persona. La joven fue hasta su casa, abrió la puerta y con su abuelo recorrieron espacio por espacio hasta que la encontraron sin vida en el baño.
Después del aviso a la Policía, advirtieron que Muñóz había estado en la noche del jueves en la vivienda. Rápidamente los agentes comenzaron a buscarlo hasta que lo hallaron ahorcado en la zona del parque García Lorca de Alta Gracia.
Relación
Muñóz y Adén comenzaron a salir en 1997 y en 2015 se casaron. Después de varias separaciones, la víctima decidió ponerle punto final a la relación hace dos meses. Desde entonces estaba luchando por conseguir un acuerdo económico para sus hijos.
Desde su entorno comentaron que Adén nunca contó haber sufrido violencia de género pero sí hubo episodios de violencia psicológica en peleas por la casa donde ella vivía con sus hijos.
Con datos de El Doce