No hace mucho tiempo, el municipio de Alta Gracia presentaba una nueva alternativa para el tránsito pesado que aún no se inauguró y que se encuentra en los límites del barrio Nuevo Amanecer hasta su salida, en la ruta 5.
Pero a tan solo un par de metros de allí hay un extenso basural que casi convive con las viviendas del barrio, y como dato por lo menos alarmante, esta´también a solo metros de las lagunas sanitarias.
Por supuesto que el riesgo ambiental es potencialmente grave, no solo por la contaminación de los líquidos, sino también del aire y como no de la flora autóctona del lugar.
De igual manera este retrato lamentable no es sino un día mas en la cotidianeidad de la ciudad, puesto que encontrar este paisaje se volvió como mínimo habitual, es raro que ya no esté, entonces, ¿a qué normalidad deben de acostumbrarse las personas?.
Mas allá de deslindar responsabilidades u alzar rápidamente el dedo índice, la historia cercana nos muestra que la acusación no basta, de hecho esta misma es la principal forma de práctica política, entonces allí donde solía haber una herramienta para esta preocupante problemática, solo hay un conjunto de enunciados que no pasan a la práctica, a los hechos.
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