Nelly Morales, reculan……perdón, recalculando

En un nuevo comunicado la jefa comunal de Los Aromos ahora habla de exposición de autos dejando de lado el Rally. Los habitantes en la calle incomodaron a Morales a pesar de las declaraciones con dudosa valentía.

A la clase política -en general- le cuesta reconocer errores, quizás porque sienten que hacerlo será una muestra de inseguridad y no de madurez o replanteo.

Nely Morales, se encuentra en este momento de su vida. Muestra con zigzagueos discursivos que es mejor poner un manto de duda o desviar la atención que decir claramente que quiere que su localidad sea sede de una fecha de Rally.

En un comunicado oficial, la comuna informó la llegada de una exposición de autos y lo del Rally fue una confusión semántica, como si los casi 2000 habitantes de la Villa todos juntos y al mismo momento se chuparan el dedo.

Desde el 13 de enero ACPUR (Asociación Civil de Pilotos Unidos de Rally) viene anunciando la primera fecha del campeonato regional en Paravachasca. Este anuncio encendió temprano la alarma de los habitantes locales que comenzaron un peregrinar que hoy mantiene pendiente de un hilo esta actividad, transformándose más en síntoma de la terquedad oficial que una fiesta deportiva.

Lo que empezó como una fecha que “unirá a dos comunas y se escuchara el rugir de los motores”, por parte de Morales, pasó (luego del reclamo airado de vecinos y la presentación en varias entidades para que suspendan la fecha) a una simple y tranquila exposición de autos, “mañana van a anunciar que los autos ni se van a encender, los van a empujar los conductores y sus familiares, si seguimos así” satirizaba un empleado cercano a la comisión comunal.

Lo cierto es que a pesar de las declaraciones que quieren mostrar decisión y valentía, la salida a la calle de los vecinos el pasado domingo y las dudas que planteo Alfredo Velez, coordinador de ACPUR al sostener “si no encontramos otro camino para la prueba se puede cancelar” muestran a una comuna en retirada.

Si tomamos a este joven gobierno local, transitando su tercer año de gestión, podemos decir que la obstinación de poner el árbol frente al bosque ha convertido la gestión en un permanente transitar de desencuentros con su comunidad.

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