Marcos Torres en los festejos: “siempre pusimos la cara, y la gente lo valoró”

Luego de los festejos en el búnker, los militantes, funcionarios y algunos intendentes y referentes de la región se llegaron a festejar en “La Soñada”, un salón ubicado sobre la ruta C-45. Tanto Schiaretti como Llaryora felicitaron a Torres a través de las redes sociales.

El clima de Hacemos Unidos por Córdoba fue solo de festejos pasadas las 19 horas de este domingo en Alta Gracia. Porque el actual intendente Marcos Torres cerró el calendario de elecciones de Santa María con una cómoda victoria que lo dejó solo, en la cúspide con el 58 % de los votos. El segundo lugar fue para Amalia Vagni (Alta Gracia Cambia) con 19 %, y el tercero para Ricardo González (Juntos por Alta Gracia) con el 10 %.

Si bien una de las presunciones que se tenía de esta elección es que habría grandes diferencias entre el peronismo y las demás fuerzas debido a la ruptura de la oposición, lo cierto es que entre ambos espacios (que componen un solo bloque actualmente en el Concejo bajo el nombre de Alta Gracia Cambia) no hubieran llegado a los 30 puntos; es decir que de ir unidos, la cosa no habría cambiado demasiado en la general, y solo podrían haber conseguido una banca más que los ponía en una situación de igualdad con la actualidad.

Tras conocer los resultados, el gobernador de la provincia, Juan Schiaretti saludó a Torres a través de las redes sociales, del mismo modo que el actual intendente de la capital cordobesa y gobernador electo, Martín Llaryora.

Luego de los festejos en el búnker, los militantes, funcionarios y algunos intendentes y referentes de la región se llegaron a festejar en “La Soñada”, un salón ubicado sobre la ruta C-45. Allí estuvieron presentes además, Lito Bevilaqua (actual vice ministro de Gobierno), Daniel Passerini (intendente electo de la ciudad de Córdoba), Paulo Cassinerio (ministro de Vinculación Comunitaria, Protocolo y Comunicación), Ricardo Sosa (ministro de Obras Públicas de la Provincia de Córdoba), entre otros.

La elección tuvo muy baja participación del electorado. De poco más de 46 mil electores, solo asistieron a votar 24.700, un número escaso si queremos hablar de aceptación popular genuina. Eso es un mea culpa que seguramente deberán revisar todas las fuerzas políticas, teniendo en cuenta, además, que está siendo una característica central de las elecciones regionales, provinciales y nacionales.

Cabe recordar que Marcos Torres asumió como intendente en 2019, tras pasar desempeñarse como concejal y luego como secretario de Gobierno de su hermano Facundo Torres. Los Torres con el padrinazgo de Hugo Testa, estuvieron visiblemente enfrentados a quien se lo conoce aún como uno de los líderes más fuertes del peronismo altagraciense: el legislador Walter Saieg. Ese enfrentamiento tuvo idas y vueltas hasta que Saieg decidió acompañar el gobierno nacional en el ministerio de Transporte y alejarse bastante de la cosa local. Pero durante esta gestión, volvió y comenzó a hacer territorio nuevamente. La apertura de un búnker, folletería., rede sociales y fotos con buen número de militantes inquietó bastante en la mesa chica torrista que vio con preocupación un armado que hasta se escuchó podría aglutinar toda la oposición de la mano del líder radical Leandro Morer y del peronista Saieg.

Pero como sucede en los cuentos de hadas….la princesa se transformó en cenicienta, y todo ese gran frente opositor se resquebrajó. Juntos por el Cambio se partió en dos, y Saieg prefirió decir que no se presentaría y que seguiría trabajando con la militancia sin disputar cargos. Ante la ruptura de Juntos, Morer también tomó la decisión de correrse (los extraoficiales aseguran que quedará con un puesto en la Defensoría del Pueblo con el venia del peronismo); y surgieron estos dos frentes con Vagni (ex legisladora, concejal e hija del histórico radical ex intendente Audio Vagni) y González (concejal y docente). Además se fueron sumando otras listas. En algunas de ellas, “las malas lenguas” sugirieron que respondían a un llamado del oficialismo a “divide y reinarás”, pero eso es algo que nunca terminará de blanquearse, aunque se supone fue de esa manera.

ALGO DE LO QUE DICEN LOS NÚMEROS

Más allá de las divisiones, algo que preocupó y mucho a la militancia radical es el bajo número que obtuvo la dupla Vagni-Rossi. El espacio Alta Gracia Cambia se formó con la UCR, el Frente Cívico y el Partido Laborista. A pesar de conseguir el acompañamiento de los referentes provinciales más fuertes de Juntos como Rodrigo De Loredo y Luis Juez, el espacio no pudo (o no supo) levantar cabeza. Si bien comenzó con una campaña fuerte yendo a la yugular de los reclamos que hoy por hoy se escuchan sobre el torrismo, al poco tiempo bajaron los decibeles y la campaña fue muchísimo más amable. Algo que muchos consideraron como el gran error debido al escaso tiempo que tuvieron todos los partidos para mostrarse.

En cuanto a sus socios políticos que decidieron ir como Juntos por Alta Gracia (ARI, PRO y el espacio de López Murphi), la campaña fue mucho más fuerte pero dedicada casi íntegramente al radicalismo. Si bien desde el principio manifestaron que esta elección era “solo para medirse, para saber cuánta gente tenemos” al pasar los días se fueron ilusionando con un posible segundo lugar, algo que la popular no veía…pero ellos si. Lo cierto es que a pesar de que su candidato Ricardo González dijo estar “contento pero con un sabor amargo” (seguramente por estas expectativas), lo obtenido es bastante bueno para ir por primera vez solos.

El Partido Demócrata (alianza con Javier Milei) que postulaba al bancario Darío Cuffa también obtuvo buen resultado considerando que es gente que no viene de la política, que se metió en el barro hace dos años solamente, y que tuvo que sostener la propuesta a pesar de que otro partido llegó a último momento y también decía ser parte de la alianza con Milei. Esto seguramente le quitó ese 1% que se llevaron los Populares Federales (con Víctor Hugo Moreyras a la cabeza), que los acercaba quizás un poquito más a González, y a la posibilidad de ganar una banca en el Concejo.

En relación a Encuentro Vecinal Córdoba (Juan Pablo Ruarte) el porcentaje fue del 5 %, bajo para lograr un lugar, aunque si el lineamiento de Torres es similar al de Llaryora (le habría ofrecido al líder del espacio Aurelio García Elorrio un cargo en Seguridad); Ruarte podría ser parte del gabinete entrante…eso estará por verse.

CÓMO QUEDA EL CONCEJO DELIBERANTE Y EL TRIBUNAL DE CUENTAS

Con los números finales, el peronismo habría logrado una banca más (seis en total), Alta Gracia Cambia dos y una Juntos por Alta Gracia. En cuanto al Tribunal de Cuentas, el torrismo logró revertir un Tribunal en contra (2 de la oposición y 1 del oficialismo durante estos cuatro años) y lograr la mayoría para su espacio. Ahora quedarían dos de Hacemos por Córdoba y uno de Alta Gracia Cambia, es decir que Leticia Luppi (actual presidenta) retendría su silla para el espacio. Sin dudas un Legislativo tan comprimido en un solo partido (y más si es oficialismo) preocupa y mucho a la cuestión democrática, otra mea cupla que deberán hacerse seguramente los referentes políticos locales de la minoría.

ESTOS SERÍAN LOS NOMBRES DE LOS NUEVOS CONCEJALES Y TRIBUNOS

Hacemos Unidos por Córdoba: Lara González (Directora de Turismo), Pablo Ortiz (actual concejal de Progreso), Duilio Silva (Director de Desarrollo Social), Pablo Soler (Secretario de Gestión Pública, Turismo, Cultura y Deportes), Consuelo Olsina (Fundación Banco de Córdoba), Marcelo Agazzi (Director de Prensa).

Alta Gracia Cambia: Martín Barrionuevo (actual presidente del circuito Alta Gracia de la UCR) y Lucía Allende (concejal de Alta Gracia Crece)

Juntos por Alta Gracia: Ricardo González (concejal de Alta Gracia Cambia)

TRIBUNAL DE CUENTAS

Hacemos Unidos por Córdoba: Martín Cugno (director de Políticas Sanitarias) y Federico Bengolea (secretario General, de Ambiente y Transporte) 

Alta Gracia Cambia: Leticia Luppi (presidente del Tribunal de Cuentas)

NÚMEROS FINALES

ALGUNAS IMÁGENES DE LOS FESTEJOS