“El desconocimiento del sistema y del territorio” provocó que el nuevo gobierno de Anisacate tomara una decisión, cuando menos, arbitraria que afectó a unos 300 niños. Le dio de baja al transporte escolar y argumenta que con el Boleto Educativo Rural es suficiente: “Esto no es así”.
En la última sesión del Concejo Deliberante de Anisacate, el oficialismo decidió no tratar el proyecto de la oposición que planteaba el transporte escolar como escencial en Anisacate, debido a una cuestión social y territorial que generó justamente que se pusiera en funcionamiento en el año 2016.
Es que esta localidad de Paravacahsca es muy grande, con 33 barrios y distancias extensas desde algunos de ellos hasta los establecimientos escolares. En algunos casos, las familias deben transitar más de 10 km (ida y vuelta) para que el estudiante tenga clases diariamente.
Sumado a la distancia, está el inconveniente de las calles de tierra, que normalmente no están en el mejor estado, y más cuando llueve provocando que ni los taxis puedan ingresar.
Todas estas cuestiones, hicieron que el municipio entendiera necesario brindar ese transporte que, como no salía de los límites de la localidad, solo debía tener la autorización del mismo municipio para cirular.
De esta manera comenzó con una trafic, luego con un colectivo, más adelante compró el segundo y adquirió un tercer debido a la demanda escolar, ya que hasta el 10 de diciembre de 2023 transportaba más de 300 alumnos diariamente, y era el servicio municipal que más reconocía la gente como eficiente en ese momento.
Sin embargo, la semana anterior a que comenzaran las clases, la actual intendenta, a través de un video de Instagram decidió informar que no circulaban más porque “estaban en mal estado y no tenían la autorización correspondiente pára circular”.
Todo esto generó marcada indiganción en las familias, no solo por el contenido, sino por las formas. Por la manera “absolutamente despersonalizada y carente de empatía” -manifestaron- que la mandataria eligió como modo de informar algo tan vital para la población.
Pero “lo peor no fue eso, sino que las quejas, reclamos y manifestaciones” de las familias afectadas fueron tildadas como “partidarias” y eso generó un mensaje desvalorizante a un aproblemática muy importante.
Hoy sábado 9 de marzo, y a dos semanas de que comience el ciclo escolar, vuelven a reclamar esperando una solución que pareciera casi utópica en este momento, ya que el oficialismo ha dicho claramente que no habrá transporte escolar y que las familias pueden solucionar el tema con el Boleto Educativo Rural.
Con esta afirmación, los dirigentes “vuelven a mostrar el desconocimiento del sistema y del territorio”, algo que remarcó el concejal Matías Cuello en la última sesión porque “si un chico vive en Valle Alta Gracia y usa el dinero del Boleto Educativo Rural para ir hasta la ruta, no puede usar el Boleto Educativo Gratuito porque no se pueden utilizar ambos. Es uno o el otro. De lo contrario debe caminar kilómetros y luego tomar el colectivo”, dijo en una sesión caliente y donde el presidente del cuerpo, Hugo Ferreryra, además, confirmó que no conoce ese barrio al que hacía referencia el edil.
“Hay chicos no están pudiendo ir a la escuela y tampoco comer en el PAICor”, dijo Cuello al finalizar el cruce que fue presenciado por las familias.