Se investiga el abuso a un niño menor de edad, también el manejo indebido de fondos y comportamientos inapropiados.
Hace pocos días fue denunciado ante la justicia el cura párroco Marcelo Siderides, quien estaba a cargo de una iglesia de Despeñaderos, y además dirigía el colegio Pío X de esa localidad.
Según se conoció, la denuncia -efecutada por un directivo de la escuela- recayó sobre la Fiscalía de Alta Gracia, quien deberá investigar un caso de abuso perpetrado a un niño menor de edad. Se trataría de un hecho de abuso sexual simple.
A su vez, el Arzopispado de la provincia de Córdoba habría iniciado un proceso de enjuiciamiento canónico contra este sacerdote tanto por la denuncia efecutada en relación al abuso, como así también por hechos relativos al manejo indebido de fondos y por comportamientos inapropiados de acuerdo a su investidura.
Siderides fue separado de su cargo hace pocos días, y luego de que se hiciera público el reclamo de padres de la institución por comportamientos indebidos.
Cabe recordar que en Alta Gracia también fue noticia y parte de un proceso judicial de varios años. La remoción de los pisos de la Iglesia de La Merced inserta en el casco histórico de la ciudad fue realmente un escándalo a nivel nacional e involucró a las autoridades religiosas, judiciales, amigos de la iglesia, Patrimonio y vecinos. Si bien todos los cañones apuntaban tanto al cura párroco Marcelo Siderides, que fue quien tomó la decisión de hacerlo y a los pofesionales a cargo de la obra, finalmente fue sobreseído.
Antes de que la Cámara Federal de Córdoba tomara esta determinación, el juez Ricardo Bustos Fierro había considerado a los imputados (tanto el sacerdote como los arquitectos Melina Malandrino, Pedro Cufre y Juan Pablo Orozco), como partícipes en la ejecución “ilegítima” de un proyecto de restauración que terminó ocasionando un “daño arqueológico irreparable”.
Foto principal: gentileza de Sumario