Más allá de que la falta de agua es una constante desde hace un par de años y viene acentuándose día a día, la bajante del río Anisacate que se vive hoy por hoy no solo preocupa, sino que también pone en alerta a todo el Valle de Paravachasca, cuyos gobiernos vienen implementando medidas para garantizar el servicio a la comunidad.
El secretario de Servicios Públicos de Alta Gracia, Maximiliano Caminada, junto al de Obras Públicas, Marcos Moreira y el titular de la COSAG Enio Mazzini, recorrieron este viernes la zona de la Toma para “certificar la bajante histórica que tiene el río Anisacate”, dijo Caminada, y pidió a la gente que “sea solidaria con el prójimo en el cuidado del agua”.
En el mismo tenor, hicieron lo propio las comunas de la región, tanto Anisacate, el Valle, Los Aromos, La Serranita, entre otras, quienes alertan a sus pobladores sobre el uso del agua y solicitan se restrinja el regado, lavado de autos, y llenado de piletas.
La situación pone en alerta roja a toda la región en consonancia con lo que ya viene sucediendo en Sierras Chicas, Punilla, entre otras zonas.