La pregunta que comienza a instalarse con fuerza en los pasillos políticos de Córdoba —y en particular del departamento Santa María— es inevitable:
¿Qué harán los referentes locales del PRO que se referenciaban en Patricia Bullrich ahora que la ministra formaliza su ingreso a La Libertad Avanza?
Aunque muchos lo veían venir desde el día uno, la firma de afiliación de Bullrich a LLA, encabezada por Karina Milei y Manuel Adorni en una plaza porteña, oficializa una ruptura que venía gestándose desde la derrota electoral del 2023 y el famoso Pacto de Acassuso. Pero si a nivel nacional la alianza entre el PRO y el gobierno libertario genera tensiones abiertas, en el interior, el escenario es aún más difuso.
En nuestra región, referentes como el legislador Ignacio Sala, el concejal Ricardo González o la senadora nacional Laura Rodríguez Machado, han sostenido posturas muy cercanas a Bullrich. Ahora deberán decidir si siguen a su referente en este salto definitivo, o si buscan preservar la identidad amarilla que reclama Mauricio Macri, con quien Bullrich rompió lanzas hace ya tiempo.
Este reacomodamiento no es menor. Con el 2025 electoral en el horizonte, las definiciones empiezan a ser urgentes. ¿Se integrarán al armado libertario? ¿Se alinearán con Macri y buscarán consolidar un PRO autónomo? ¿Optarán por una estrategia mixta, en tono colaboracionista pero sin ceder la marca?
Lo cierto es que la jugada de Bullrich genera revuelo, deja preguntas abiertas y pone a sus seguidores locales frente a un dilema político profundo: ¿Ideología o supervivencia? ¿Lealtad o estrategia?
Los próximos movimientos mostrarán quién sigue siendo soldado de la ministra, quién se corre del mapa y quién intenta reinventarse en un tablero que cambia de forma cada semana. (Sin contar el costo político que todo esto genera, claro).