“Si denunciamos, el barrio se protege”: el mensaje de los vecinos de Barrio Crucero Sud

Luego de que se hiciera público el robo ocurrido en una vivienda del Barrio Sud, en la ciudad de Alta Gracia, Mi Valle dialogó con integrantes de la Comisión Vecinal, quienes expresaron la preocupación existente y detallaron las acciones que vienen impulsando junto a los vecinos para fortalecer la prevención y la seguridad en la zona.

Agus, Anahí y Patricio recibieron al equipo periodístico y relataron que el hecho principal ocurrió durante la madrugada del jueves al viernes pasado, cuando una vivienda fue desvalijada en el sector 1 del barrio. En paralelo, ese mismo día se registró otro intento de robo en una cabaña de alquiler del sector 2. En este último caso, la activación de una alarma permitió que los delincuentes solo alcanzaran a llevar un televisor antes de retirarse.

Según explicaron, ambos inmuebles eran casas de uso eventual, una situación que —advirtieron— suele repetirse en varios sectores del barrio y que las vuelve más vulnerables. “La diferencia estuvo en las medidas de seguridad: una tenía cámaras, la otra alarma, y eso marcó el resultado”, señalaron.

A raíz de estos hechos, vecinos y vecinas solicitaron una reunión con las autoridades, que se concretó el martes pasado con la presencia del subcomisario Molina y personal policial. Durante el encuentro, se despejaron numerosas dudas y se hizo especial hincapié en la importancia de realizar las denuncias ante cualquier hecho delictivo, por mínimo que sea, y de requerir la presencia policial en el lugar.

Desde la Comisión Vecinal remarcaron que las denuncias son claves para que la zona sea considerada prioritaria en materia de patrullaje y para avanzar en la instalación de alarmas comunitarias. “Si no hay denuncias, no se puede declarar la zona como ‘caliente’ y eso limita la posibilidad de reforzar la seguridad”, explicaron.

Actualmente, los sectores 1 y 2 cuentan con alarmas comunitarias instaladas por los propios vecinos, mientras que el sector 3 —ubicado hacia el sur, en dirección a Villa Los Aromos— continúa reclamando la colocación de este sistema, un pedido que, según indicaron, fue presentado ante el municipio en febrero del año pasado.

También se abordó la confusión existente respecto a un dispositivo ubicado en el ingreso al barrio, sobre la ruta. Allí se aclaró que no se trata de un domo de seguridad, sino de un lector de patentes, destinado a detectar vehículos con pedido de captura o vinculados a hechos delictivos. Si bien los vecinos solicitaron la instalación de un domo, las autoridades explicaron que el radio ya se encuentra cubierto por otros puntos de control en la ciudad.

En cuanto a la presencia policial, los vecinos reconocieron que tanto la Guardia Urbana como la Policía realizan recorridos frecuentes, con horarios extendidos los fines de semana, aunque coincidieron en que el contexto actual de inseguridad exige reforzar las acciones preventivas.

“Es fundamental llamar al 911 y a la Guardia Local ante cualquier situación, incluso por hechos menores. No se trata solo de denunciar, sino de que la policía se haga presente y quede el antecedente, porque eso después incide en las decisiones que se toman desde Fiscalía”, remarcaron.

Finalmente, destacaron el crecimiento sostenido del barrio, especialmente desde 2020, con más familias que eligen vivir de manera permanente en la zona. En ese marco, subrayaron la importancia del trabajo colectivo, el contacto entre vecinos —a través de grupos de comunicación— y el compromiso conjunto para enfrentar los desafíos que trae el crecimiento.

“Esto se construye paso a paso y entre todos. Si estamos unidos, es mucho más fácil encontrar soluciones”, concluyeron.