El hecho ocurrió en enero de este año en la ciudad de Villa Mercedes, San Luis. Todo quedó filmado por uno de los amigos del joven.
Un Policía deberá pagarle una indemnización de 45 mil pesos a un joven al que le pegó una bofetada en la ciudad de Villa Mercedes, a 100 kilómetros de la capital de San Luis.
Así lo determinó el juez de Garantía Nº 2 de la Segunda Circunscripción Judicial, Leandro Estrada, luego de una audiencia de conciliación entre ambas partes, a raíz del hecho ocurrido el 16 de enero último en la avenida Jorge Newbery, a la salida de una fiesta.
Estrada dio lugar al proceso de conciliación entre el oficial principal Rubén Alejandro Romero y el joven agredido, Marcelo Slovoyañock, por el caso de violencia ocurrido en la citada ciudad y dispuso que el oficial deberá pagarle 45 mil pesos en compensación de resarcimiento económico.
Según informaron los medios de San Luis, en el documento del juez, se indica que Slovoyañock aceptó “una reparación económica” que le propuso Romero, con lo cual se concretó un pago de $15 mil, acuerdo que contemplaba otras dos cuotas por el mismo monto, para hacerse efectivas en abril y mayo y, de ese modo, dieron “por resuelto el conflicto que ocasionó el inicio de la causa”.
Con esta medida, Estrada, basándose en el artículo 59, inciso 6 del Código Penal, resolvió: “Declarar extinguida la acción penal en la presente causa por conciliación en las partes intervinientes”.
El caso tomó estado público por un video que se viralizó en las redes sociales donde se ve a un grupo de jóvenes parados sobre la vereda y a pocos metros una patrulla Ford Ranger estacionada con una oficial al lado. En la grabación se ve que la mujer le ordena a uno de los hombres que tenía puesto un remerón floreado: “Miráme a mí, miráme a mí”.
Momentos después apareció uno de los compañeros de la policía femenina y le dijo al joven: “Mirá la camisa que tenés”, tras lo cual levantó su mano derecha y le dio una cachetada en el costado derecho de la cara.
Uno de sus amigos intervino para tratar de separar al efectivo del agredido y fue allí cuando intercedió la oficial inspectora para evitar una discusión, mientras que, por esta acción, ambos uniformados fueron puestos a disponibilidad en la fuerza policial.