Varias familias buscaron tener una reunión con la presidente comunal Nelly Morales por el recorte que empezaba a funcionar el 1 de agosto. Esta medida quedó en suspenso por cinco días y buscarán revisar otras alternativas.
El último viernes la comunidad educativa de Villa Los Aromos recibió en los cuadernos de comunicaciones la noticia que el comedor escolar iba a realizar recortes por lo que un número incierto de estudiantes quedaban fuera del servicio de desayuno o merienda y almuerzo.
Si bien desde la comuna informaron que se estaba cubriendo a un 50% de los estudiantes que asisten al comedor con fondos propios, esto debía recortarse porque “no queremos entregar a la próxima gestión una comuna deficitaria”, dijeron.
Por este motivo, parte de la comunidad educativa se hizo presente esta mañana en la sede comunal, buscando ser atendida por Nelly Morales, quien en un principio se negó rotundamente e incluso convocó la fuerza policial, teniendo en cuenta que los padres afirmaron que “no se retirarían hasta ser atendidos”.
Pasadas las horas, la mandataria accedió a recibir a un grupo de cuatro representantes para plantear la postura de la comuna y escuchar las demandas de las familias.
Ante esta situación se comprometió a “revisar la decisión“, abriendo un compás de espera de cinco días, donde el comedor seguiría brindando el servicio a la totalidad de los escolares y buscando alternativas para sostener el servicio hasta el fin de su mandato; algo que deberá estar definido el próximo lunes 7 de agosto.
UN SISTEMA ¿PERVERSO?
El sistema de comedores escolares tiene un precio muy alto para todas las administraciones locales. Es que desde que se implementó el traspaso desde la provincia, el PANAL arma, pero los reclamos llegan directamente a las puertas de las comunas y municipios.
Es decir, se cruzan datos de forma anual, sin tener en cuenta las condiciones territoriales de cada grupo familiar, donde existen costos más elevados de traslados, familias con un solo ingreso, inclusive no censando los padres en niveles de desocupación. Por ejemplo, si una familia, carece de un ingreso fijo, pero tiene una vivienda única a nombre de alguno de los padres, ese alumno ya no ingresa al beneficio del PAICOR, desconociendo la verdadera realidad que atraviesa.
Otro tema central en este servicio es la baja asignación de recursos por parte del programa provincial, por cada chico empadronado, los gobiernos locales reciben $70 pesos para cubrir desayuno o merienda y $280 pesos por el almuerzo, llegando a tener $350 pesos en total, una cifra irrisoria si se tiene en cuenta el aumento permanente de la canasta alimentaria.
Antes y después de las elecciones
Si bien el sistema expone a las administraciones a tomar decisiones sobre un programa que solo administran, pero no intervienen en su implementación, lo cierto es que en el caso de Villa Los Aromos, este recorte se da a días que la actual administración perdiera las elecciones locales, quedando en cuarto lugar.
En el resto de las localidades de Paravachasca que administran este sistema, las comunas o municipios, se mantiene el modelo de brindar el servicio al 100% de los alumnos que asisten al comedor. Anisacate, La Serranita, Dique Chico, por nombrar a algunas, son localidades que cuentan con un empadronamiento promedio del 60% de beneficiarios y asumen el costo, garantizando el servicio a la totalidad de estudiantes.
El lunes será el día D, donde se sabrá si esta situación tendrá una resolución favorable a los niños y niñas que asisten a la escuela de Villa Los Aromos, o las familias volverán a tomar el protagonismo buscando garantizar un derecho adquirido de los escolares.