Se trata de Julio Vélez quién es miembro de la Fundación FRAP (Fundación de Rescate y Atención Primaria) de Villa Parque Santa Ana desde hace un año.
El domingo pasado, Julio Vélez se convirtió en un ángel para un niño de 13 años que se estaba ahogando en una playa de la localidad de Almafuerte.
Julio, quien es oriundo de la localidad de Villa Parque Santa Ana y miembro desde hace un año de la Fundación FRAP (Fundación de Rescate y Atención Primaria) de esta localidad, se encontraba de vacaciones, disfrutando de un día de playa en la Almafuerte, cuando se percata de que en el agua, a lo lejos, había un niño que se encontraba gritando por ayuda.
“Escuché que un chico pedía ayuda, a lo lejos, en el agua, gritaba <ayuda> y se sumergía y volvía a salir y volvía a gritar y se volvía a sumergir… en ese momento tiré todo los elemento que tenía en mis manos porque iba con la billetera, el celular y la toalla, tiré todo el piso y salí corriendo hacia el agua” contó Julio para Mi Valle.
“Todas las personas miraban… me largué al agua y empecé a nadar. Se me hacía eterno llegar, y cuando finalmente llegué al lugar, él niño me abrazó desesperado, quería salir del agua, y en la desesperación me empuja hacia abajo a mi. Entonces lo separe de mí, lo hice girar y lo agarré de espalda y así lo fui llevando” agregó.
“Estaba bastante lejos, me costó mucho sacarlo, el agua te cansa mucho, y no llegaba, no llegaba y yo ya estaba muy cansado y por suerte se sumó otra persona a ayudarme, lo agarró del otro lado y entre los dos lo fuimos sacando hasta que llegamos más a la orilla y pudimos hacer pie. Entonces lo alcé, lo saqué en los brazos hasta la orilla, rápido para poderlo atenderlo” agregó.
“Lo acosté, lo puse de costado por si había tragado agua y no se ahogara, le tomé el pulso, le hice una serie de preguntas, le pregunté la edad, cómo se llamaba para que se le fuera un poco el susto que tenía. En eso llegaron unos policías y la ambulancia y lo llevaron al hospital para darle una mejor atención” destacó.
“Doy gracias de que pude ayudarlo ya que estoy preparado para poder hacer cualquier tipo de rescate. En la fundación nos enseñaron muchas cosas, tenemos muchos cursos y hemos aprendido mucho. Nunca me imaginé que ese día iba a hacer mi primer rescate” cerro diciendo Julio.
Luego, la mamá del nene le contó a Julio que su hijo estaba jugando a la pelota con sus hermanos y con amigos en la playa, y que cuando la pelota se fue al agua, el niño trató de ir a buscarla. Esto habría desencadenado esta situación.
