Elecciones La Falda: ¿un reflejo de Alta Gracia 2019 y 2023?

En los comicios del pasado domingo en La Falda, el oficialismo de esa ciudad, representado por Juntos por el Cambio, se impuso por más del 70% de los votos a la lista del peronismo K. En esta contienda electoral se presentaron solo esas dos listas y la gran ausente fue la pata del peronismo Schiaretista.

La omisión de no presentar batalla por parte del justicialismo provincial y la división con el peronismo K en La Falda, dejó el camino allanado para que la alianza cambista se mantuviera en el poder.

Salvando las particularidades, similar proceso se vivió en Alta Gracia en las últimas elecciones a Intendente local. Marcos Torres terminó ungido intendente con un exiguo número de votos, hasta el punto de llegar a ser sospechado el resultado que lo dio ganador.

En dicho proceso electoral, al igual que en La Falda este fin de semana, un sector del peronismo local, que adhería a Walter Saieg, no fue parte del frente justicialista de Hacemos por Córdoba que lideraban los hermanos Torres. Eso produjo una migración de votos del saieguismo hacia otras alternativas políticas.

Se viene un nuevo acto electoral en la ciudad para elegir intendente. Los escenarios no son tan disímiles al del año 2019, pero con condimentos más picantes.

Hacemos por Córdoba, como expresión del peronismo provincial, cuenta con un candidato, Marcos Torres, lanzado y que busca la reelección. También desde el peronismo hay un sello habilitado para competir en el ámbito local. Su nombre es Unión por Alta Gracia, que estaría fogoneado por Walter Saieg y que desde hace algunos días está generando consignas políticas como propuestas de gobierno.

La oposición, que en el 2019 se unificó para ser alternativa de poder bajo el nombre de Alta Gracia Crece, se debate entre postulantes repetidos y nuevas alternativas que en todos estos años no hicieron pie en el paisaje político de Alta Gracia.

Luego queda una porción de sectores políticos que veremos si están dispuestos a jugar y de qué manera. Los K del Frente de Todos, Libertarios de Milei, Vecinalitas de Elorrio y algunos grupos más de izquierda que siempre presentan sus candidatos.

En todo este concierto, y si la oposición no encuentra puntos de unión, el oficialismo es el que tiene chance de capitalizar la división de los adversarios. Una cuestión “de matemática pura”, diría la nueva era de peronistas que mide absolutamente todo. Aunque… hay un dato que no está siendo tenido en cuenta y es el punto en cuestión que podría torcer la balanza (a pesar de las especulaciones): el turbulento panorama social, que en 2023 es muchísimo más complicado y apático a lo que sucede adentro de cada sede partidaria de lo que ha ocurrido en años anteriores. A esto, claramente se le suman caras y promesas repetidas, nuevos referentes con viejas costumbres y alianzas repelidas por los ciudadanos de a pie. Sin dudas, es hora de replantearse el arte de hacer política ¿Estarán a tiempo?.