El país anfitrión siempre está entre los más elegidos para degustar platos típicos.
No hace falta dar demasiados detalles para comentar sobre su carpa gastronómica porque es más que conocida por muchos. A cargo de la Agrupación Gaucha Padre Buteler, desde hace años Argentina despliega sabores y tradiciones en cada edición. Perfectamente ataviados con trajes típicos muchos de los que integran el grupo son los encargados del arduo trabajo que tiene la cocina argentina que arranca cada día que dura el festival desde tempranito con la preparación del locro “ este año con unas 800/1000 porciones diarias” , la carbonada para las empanaditas calientes que salen a la noche “ unas 800 docenas por jornada”, la carne con cuerno, el chivito a la llama y la humita como estrellas del menú argentino que se completa con asado de tira y choripán.
“Cada uno tiene su área y todos trabajan a full” dijeron Walter y Roberto los más “antiguos” de la agrupación según ellos mismos se definieron.